He perdido la cuenta de las veces que puedo ver a la semana en la tele, en las redes sociales o escuchando al gurú de turno los mensajes y consejos para ser mejores, para ser felices, para conseguir tus metas, para para para…
Estoy cansado de que nos culpen de todo.
Me aburre el tú puedes, el todo está en nuestra actitud, que todo depende de las ganas, de la motivación y el creer en uno mismo. Ojalá llegue el día en donde nos cuesten que vivimos con más gente, que no estamos solos y que por muy fuerte que uno cierre los ojos mientras desea algo las cosas no cambian.
Nunca entenderé como ciertos charlatanes se dan la licencia de creer que tienen la solución para nuestra felicidad. Nunca darán un dato que lo sostenga, un estudio que lo defienda o algo que roce lo serio que lo justifique. Pura homeopatía.
Bonito pero vacío.
Los cambios, tus cambios, dependen de tí pero también de quién te rodea. De quien te apoya y quien te hunde. De quién te ayuda y quien te empuja. Y, menos mal, que no solo dependen de uno…
Porque si solo fuera por mí y no por tí…
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